Las autoridades marinas en Puerto Rico investigan la identidad de varias personas que hostigaron a dos ballenas jorobadas, una especie en peligro de extinción, a su paso frente a la costa noroeste de la isla caribeña.
"Definitivamente hubo hostigamiento hacia las ballenas. Se les notó por el comportamiento al ir a una velocidad mayor de lo acostumbrado", afirmó hoy a Efe el biólogo marino Antonio Mignucci sobre el suceso ocurrido el sábado frente a la playa Crash Boat, de la localidad de Aguadilla.
La ballena jorobada, cuyo nombre científico es Megaptera novaeangliae, fue incluida en la lista federal de especies en peligro de extinción en 1970.
El hostigamiento a estos mamíferos marinos es regulado por leyes federales y estatales y los implicados pueden ser castigados con multas de hasta 50.000 dólares e incluso un año de cárcel.
Un vídeo tomado por varios desconocidos que manejaban motoras acuáticas y que muestra el hostigamiento a ambos mamíferos, madre e hija, fue difundido este fin de semana por el locutor radial Jorge "El Molusco" Pabón, en su página de Faceboook, lo que contribuyó a que las autoridades se percataran y abrieran una investigación.
Mignucci explicó que las ballenas jorobadas abundan en las aguas frías de Irlanda, Groenlandia o Canadá. No obstante, el 80 % de ellas se muda entre noviembre y abril a las cálidas aguas del Caribe para reproducirse y tener aquí sus crías.
Se calcula que el 10 % de las que emigran buscando el calor tropical merodea por las inmediaciones de Puerto Rico, sobre todo en el área oeste y noroeste de la isla.
El Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) de Puerto Rico tiene una copia del vídeo y lo está investigando, según confirmó la secretaria de este organismo, Carmen Guerrero Pérez, en un comunicado.
Detalló que el hostigamiento al que se enfrentaron las ballenas pudo haber provocado que la madre abandonara a la hija, que ya tiene un tamaño considerable, lo que puede ser letal para la cría.
La Ley de Observación de Ballenas establece que la distancia mínima para observar a las ballenas ha de ser de al menos cien metros.
Cuando se trata de dos embarcaciones o más, la distancia para observarlas es de cuatrocientos metros, al tiempo que si se trata de una madre con una cría los vehículos nos pueden si quiera acercarse. EFEverde
