La calima que afectó a Canarias entre los días 22 y 25 de febrero provocó la mayor reducción de la visibilidad en las islas en últimos 40 años, según ha publicado este viernes la Agencia Estatal de Meteorología.
“Hay registros de ocho intrusiones de calima de semejantes características desde 1981, tres de ellas en meses de febrero (1989, 2000 y 2020), algunas de las cuales resultaron ser más persistentes, duraron más tiempo, pero en ninguna de ellas se produjo una reducción de la visibilidad tan acusada como en esta de 2020“, se asegura el Avance Climatológico de la agencia estatal.
El episodio de calima de febrero pasado afectó completamente al archipiélago en todas sus islas y las altitudes, con reducciones de visibilidad por debajo de, como poco, 10 kilómetros, y las más intensas (400 metros) tuvieron lugar en los aeropuertos de Gran Canaria y Tenerife Sur.
De hecho, en los días de calima más densa, el espacio aéreo de Canarias prácticamente estuvo cerrado y se cancelaron cientos de vuelos.
Temperaturas por encima de la media de Europa y noroeste de África
Los días 22 y 23 de febrero, se registró también un temporal de viento que fue uno de los de mayor magnitud de los diez últimos meses de febrero, junto con los de 2010, 2017 y 2018.
En cuanto a las temperaturas de febrero, estuvieron claramente por encima de los valores esperados del periodo de referencia 1981-2010 en casi toda Europa y noroeste de África.
En Canarias, febrero de este año se sitúa entre los tres más cálidos, junto con los de 1998 y 2010.
Las temperaturas, muy por encima de los valores normales, fueron especialmente anómalas en los periodos de los días del 1 al 5, el 13 y el 14 y del 23 al 25. EFEverde
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