Unas 450 personas han sido desalojadas este viernes por la mañana del municipio zamorano de Villardeciervos y de la localidad de Boya por el incendio forestal de la Sierra de la Culebra que ha obligado a desocupar ya otras seis poblaciones y ha arrasado por el momento casi 9.000 hectáreas de terreno.
En Villardeciervos, donde se había dado cobijo en su pabellón multiusos a una treintena de vecinos llegados de madrugada de San Pedro de las Herrerías y Palazuelo de las Cuevas, tanto esos evacuados como toda la población de ese municipio de 400 habitantes ha sido desalojada, según ha informado a Efe su alcalde, Lorenzo Jiménez.
Jiménez ha asegurado que están saliendo todos los vecinos como pueden, algunos en coches particulares y otros en autobuses y alguna patrulla de la Guardia Civil.
La población es llevada a la localidad de Camarzana de Tera, “sobre todo por la previsión de humo ya que el viento va a cambiar esta tarde y va a haber mucho“, ha precisado el regidor municipal, que ha recordado que Villardeciervos celebraba estos días sus fiestas patronales, que ha tenido que suspender y por eso había una mayor población a la habitual, en torno a 400 vecinos.
Por su parte, el alcalde de Mahíde, Roberto Cisneros, ha indicado que el anejo de Boya, en el que residen medio centenar de personas, también ha tenido que ser desalojado, al igual que de madrugada fue llevada a lugar seguro la población de la localidad de Mahíde y de los otros tres anejos del ayuntamiento: Pobladura de Aliste, La Torre de Aliste y San Pedro de las Herrerías.
Cisneros, que pese al desalojo ha permanecido en Mahíde para junto a otros siete vecinos, utilizar unas mangueras del Ayuntamiento para apoyar las labores de extinción, ha indicado telefónicamente a Efe que la situación sigue muy complicada y “aunque nosotros no tenemos experiencia y no somos bomberos hacemos lo que podemos“.
Ha aclarado que por el momento el fuego no ha entrado en el casco urbano de ninguna de las cinco localidades evacuadas que conforman el ayuntamiento, aunque sí se ha quedado a las puertas en La Torre de Aliste, donde el fuego pudo atajarse con la colaboración vecinal con unas mangueras al ser una zona en la que había hierba baja.
También ha reconocido que su mayor preocupación es sobre lo que pueda pasar en San Pedro de las Herrerías, al ser el casco urbano que está rodeado de vegetación más espesa y haberse marchado todos los vecinos.
El alcalde de Mahíde ha señalado además que el humo ha remitido bastante con respecto a la madrugada, lo que puede deberse a que haya cambiado el viento o que ya no exista tanta llama.
El alcalde de Riofrío de Aliste, otro de los ayuntamientos de la Sierra de la Culebra afectados, Germán Matellán, ha indicado que las últimas horas han sido “críticas” ya que los focos que estaban controlados se han reavivado con el cambio de viento.
“Pese a que había muchísimos medios de extinción, ellos controlaban un foco pero inmediatamente se reavivaba otro y no había forma de controlar todos, hasta que subió el fuego a copas y ya eso es imposible“, ha declarado. EFEverde