Madrid.- España no está en la senda de alcanzar la Agenda 2030 en los cinco años que quedan para su finalización y es necesario un cambio radical para modificar las tendencias y lograr el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Así se desprende de un informe del Observatorio de Sostenibilidad y la Fundación Ciudadanía, que ha evaluado el cumplimiento de los ODS en España en 2025 y las tendencias observadas desde 2015.
A partir del análisis se ha realizado una serie de recomendaciones globales y por ODS para intentar llegar a 2030 con un mayor grado de éxito de la Agenda 2030.
Según un comunicado difundido este jueves por el observatorio, llama la atención que «ahora que la ciencia ya ha demostrado que España es uno de los países más en riesgo por el cambio climático, no se tomen las medidas para que sea el país más preparado para este reto y persistan los retos de desigualdad (ODS10), de acción contra el cambio climático (ODS13) y de adaptación de ciudades y comunidades sostenibles (ODS11)».
Estado actual
Con relación al estado actual de los 17 ODS, el observatorio halla que siete presentan graves carencias, como el Fin de la pobreza (ODS1); el de Hambre cero (ODS2), ya que continúa el uso masivo de fertilizantes y pesticidas, la instalación de macrogranjas, agricultura intensiva, datos de obesidad, etc.
Incluyen además el relativo al Agua limpia y saneamiento (ODS6) por el aumento de regadíos, la falta de caudal ecológico y los problemas de depuración y el de Trabajo decente y crecimiento económico (ODS8) pues el observatorio encuentra entre las carencias graves empleo precario, temporalidad, etc.
El documento apunta a la Reducción de las desigualdades (ODS10) por la brecha entre ricos y pobres por factores como salarios, rentistas y no rentistas, problema de la vivienda, segregación en ciudades y al de Vida submarina y costa (ODS14) por carencias como la artificialización de la costa.
También figura el de Vida de ecosistemas terrestres (ODS15), donde detecta carencias en cuanto a incendios forestales, falta de corredores ecológicos, adaptación al cambio climático.
Tan solo dos: el ODS4, Educación de calidad, y el ODS17, Alianzas para lograr los objetivos, consiguen un nivel intermedio por los aceptables niveles en las políticas en esos dos ODS.
Tendencias
En cuanto a algunas de las tendencias observadas, el informe observa un deterioro destacable en cinco ODS: Producción y consumo responsables, Acción por el clima, Hambre cero; Salud y bienestar y Agua limpia y saneamiento.
Con un nivel de ligero deterioro en las políticas se encuentra el ODS15, Vida de ecosistemas terrestres, donde se han visto algunas mejoras en las políticas de conservación de espacios protegidos aunque persisten problemas como la protección de especies emblemáticos, como el lobo o en la protección de corredores ecológicos.
El análisis destaca asimismo mejoras destacables en dos temas cruciales como el Fin de la pobreza y la Igualdad de género, donde cree que se han iniciado políticas de mejora que todavía no han logrado sus frutos.
Llama la atención también el ODS7, Energía asequible y no contaminante, donde destaca que se ha avanzado mucho en energía no contaminante pero no se ha avanzado nada en que sea asequible.
Sobre esto, apunta que España presenta uno de los mayores valores de pobreza energética de Europa mientras las empresas acumulan enormes beneficios, y además el actual modelo presenta graves problemas sobre biodiversidad.
Recomendaciones
Como principales recomendaciones se encuentra la necesidad de lograr un gran pacto entre todos los agentes, administración publica, empresa y sociedad civil para encarar los desafíos de la Agenda 2030 en España, que estarían muy ligados a la necesidad de enfrentar el caso de la emergencia climática.
Carlos Alfonso, autor principal del informe, ha destacado «la necesidad de coordinar todas las acciones desde las diferentes administraciones, empresas y sociedad civil».
Por su parte, Fernando Prieto, coordinador del documento, ha señalado que «se acaba el tiempo» y que no se están tomando las medidas necesarias respecto a los graves riesgos que enfrenta la sociedad, como el aumento temperaturas y de fenómenos meteorológicos extremos como inundaciones, incendios, sequias…». EFEverde
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