Desde que leí hace más de un año "Con el agua al cuello", me he hecho fan de su protagonista: el comisario Jaritos, jefe del Grupo de Homicidios en Atenas.
Su creador Petro Márkaris me ha hecho comprender lo cerca que estamos del modelo griego, con sus corruptelas, clientelismos, angustias, desahucios, suicidios, protestas....
El próximo 1 de enero de 2014: los griegos vuelven al dracma, pero también los españoles a la peseta, y los italianos a la lira y se hacen un poco más pobres.
Así lo imagina al menos Márkaris (Estambul, 1937) en «Pan, educación, libertad», novela que cierra la "trilogía de la crisis", de la que forman parte el citado «Con el agua al cuello» y «Liquidación final».
Entre asesinato y asesinato, Márkaris nos retrata a la sociedad griega, la que se parece tanto a la española, y nos habla de sus jubilados que cobran 400 euros, y de su hijos titulados y en paro, y del racismo que resurge...