Un estudio de la Estación Biológica de Doñana (EBD-CSIC) ha constatado el Mediterráneo occidental como un punto de anidación “cada vez más frecuente” de la tortuga boba y apunta al cambio climático y la consecuente subida de las temperaturas como causa de ello.
Esta especie de tortuga, según ha informado la EBD-CSIC en un comunicado, se distribuye por aguas cálidas subtropicales en todo el mundo, y aunque, el Mediterráneo Occidental no es reconocido como un área de anidación frecuente para esta especie, se han venido registrando varios nidos en los últimos años.
Ha recordado el que se detectó en la playa de Pulpí (Almería) en 2015 o el de agosto de 2020 en la de Los Boliches de Fuengirola (Málaga), que supone el punto de anidación más occidental registrado para esta especie hasta la fecha y el primero detectado en el Mar de Alborán.
“Estos eventos esporádicos se han relacionado con cambios en los patrones climáticos y el potencial calentamiento de la cuenca occidental de Mar Mediterráneo”, ha explicado Adolfo Marco, investigador de la EBD.
Al igual que se hizo con el nido de la playa de Pulpí, el detectado en la playa de los Boliches fue trasladado a otra localización debido a la proximidad del nido con la orilla y el inminente riesgo de inundación; la anidada fue dividida en dos.
Sesenta huevos fueron trasladados a la cercana playa de Calahonda en Marbella para que los huevos fueran incubados de forma natural y los doce restantes fueron transferidos al de Bioparc en Fuengirola para su incubación bajo condiciones controladas.
Alrededor de los 50 días de incubación, se detectaron las primeras eclosiones en la playa de Calahonda: 49 de los 60 huevos eclosionaron, lo que supone una tasa de éxito mucho mayor a la media registrada en nidos previos localizados en España.
En cuanto a los huevos incubados en Bioparc, seis fueron incubados a una temperatura de 30,5º y otros seis a 29,5º; once de los doce huevos eclosionaron.
Programa inicial de cría
Todas las tortugas fueron posteriormente trasladadas al Centro de Gestión del Medio Marino Andaluz (CEGMA) para incluirlas dentro de un programa inicial de cría, siendo liberadas 15 de esas crías a principios de agosto de este año en Fuengirola y el resto 15 de las crías, cuando estas contaban con alrededor de un año de edad, mientras que el resto se liberarán este mes de septiembre.
[box type=”shadow” ]Las tortugas marinas presentan un fuerte comportamiento filopátrico, es decir, tienden a volver a su lugar de nacimiento para reproducirse; sin embargo, lo que se está observando con los pocos adultos que anidan en Andalucía apunta a lo contrario.[/box]
Consideran que ello es debido al calentamiento del Mediterráneo occidental: “Son animales dispersantes que creemos que están respondiendo a un cambio climático importante, en lugar de responder a su estímulo de fidelidad a la playa donde nacieron”, ha añadido, para concluir que estos puntos de anidación en el Mar de Alborán podrían ser más frecuentes en el futuro si continúa el calentamiento climático. EFEverde