Barcelona(EFEverde).- La zona del Montseny-Guilleries, en el centro-este de Cataluña, se ha consolidado en la actualidad como el primer productor de abetos de Navidad del sur de Europa, según ha informado la asociación de Cultivadores de Árboles de Navidad Asociados de Cataluña (CANAC).
Según datos de esta asociación, que agrupa a una treintena de productores, uno de cada dos árboles producidos en esta zona se destina a la exportación, principalmente a Francia y al Reino Unido, mientras que el 90 % de los abetos que se venden en la Península Ibérica también proceden de esta área catalana.
Los abetos catalanes ecológicos también se exportan a países como Italia, Portugal, Alemania y Suiza.
"El abeto de Navidad ecológico producido en Cataluña va ganando prestigio en el extranjero, sobre todo en aquellos países de la Unión Europea donde la tradición del árbol de Navidad está profundamente arraigada", ha explicado el presidente de CANAC, Albert Gallifa.
En este contexto, Gallifa ha destacado que su marca es cada vez más conocida y que "en Europa ya no se sorprenden de ver abetos provenientes del sur".
Gallifa ha subrayado el fuerte incremento que han experimentado las exportaciones este año al mercado francés, que representa la mitad de las ventas totales de CANAC en el extranjero.
Francia es uno de los grandes consumidores de abetos, con una media de 5 millones de árboles vendidos en cada campaña navideña, una cifra que multiplica por cinco la del mercado español.
"El incremento de ventas en el país vecino ha sido exponencial este año, con un incremento del 50 %", ha insistido el presidente de CANAC, que ha calculado que este año las exportaciones de abetos del Montseny-Guilleries crecerán un 10 % en relación con la campaña del 2012.
Sin embargo, la campaña de Navidad 2013 ha sido "un punto atípica", según Gallifa, por las altas temperaturas registradas en el mes de octubre, lo que ha retrasado la campaña varias semanas.
En condiciones normales, según el presidente de CANAC, la climatología de la zona del Montseny-Guilleries les permite ser muy competitivos porque se trata de una zona alta, húmeda y lluviosa, donde hace el frío suficiente pero que, a diferencia de los climas más nórdicos, dispone de muchas horas de sol, un factor que permite que sus abetos puedan crecer mucho más rápido.
Todos los abetos que cultiva CANAC llevan una etiqueta que confirma que se trata de árboles procedentes de viveros y 100 % ecológicos.
En Cataluña, básicamente, se cultivan las especies 'abies nordmanniana', la más vendida, y las 'abies pinsapo', 'picea excelsa' y 'labia masjoanis', esta última una especie autóctona de las Guilleries.
Gallifa ha promocionado el consumo de abetos de Navidad "porque es un producto que cumple con las tres 'r', porque es reciclable, reutilizable y renovable".
Explica que, por ejemplo, una vez finaliza la campaña navideña, los árboles cultivados mediante procesos agrícolas 100 % respetuosos con el medio son reciclados y transformados en abono natural.
Para reivindicar estas buenas prácticas, este año CANAC ha colocado árboles de grandes dimensiones en Barcelona -destaca el situado en la avenida del Portal del Ángel-, Vic (Barcelona) y Sant Hilari Sacalm (Girona).
La CANAC ha puesto en marcha un proceso para obtener la denominación de origen Abeto Montseny-Guilleries.
"Actualmente sólo hay una denominación de origen, que es una azalea de Suiza. Si conseguimos la denominación de origen, daría valor añadido a nuestro producto que está cultivado de manera artesanal", ha sentenciado Gallifa.
Según el presidente, CANAC también están pendientes de un certificado de buenas prácticas ambientales porque en el cultivo de estos árboles casi no utilizan maquinaria, de manera que las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera son casi insignificantes. EFE
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