EFEverde.- La Fundación Naturaleza y Hombre y la Confederación en Defensa de las Abejas en la Cornisa Cantábrica (CODACC) han pedido al Gobierno autonómico de Cantabria la adopción de un protocolo de actuación “ambicioso” para frenar la expansión y erradicación del avispón asiático.
Esta especie invasora, originaria del norte de la India, llegó de forma accidental a Burdeos (Francia) en el año 2004 a través de un barco procedente de China y, desde allí, saltó a la península ibérica.
En la actualidad, se extiende por Galicia, Asturias, País Vasco y Cantabria, pero sólo las tres primeras CC.AA. disponen de “estrategias de actuación para frenar la expansión y erradicación de este insecto” según ha explicado a Efeverde la coordinadora del Programa de Conservación de la Montaña Pasiega y Oriental, Blanca Serrano.
El avispón asiático amenaza la biodiversidad porque devora todos los insectos polinizadores que aseguran la reproducción de las especies autóctonas y su avance por la cornisa cantábrica se produce mediante colonizaciones progresivas.
“Su nido, como el de las avispas comunes, cuenta con una reina que se reproduce anualmente y cada una de las nuevas reinas parte a formar nuevos enjambres a unos diez o quince kilómetros del original”, detalla Serrano.
La especialista ha advertido además de que estos nidos pueden formarse “incluso en camiones o en trenes”, con lo cual pueden expandirse con mayor rapidez y acabar por instalarse en toda la península ibérica.
En el caso concreto de Cantabria, sólo “desde hace unos pocos meses se ha habilitado el teléfono de emergencias 112 para que los ciudadanos puedan avisar si detectan estos ejemplares de avispas o sus nidos para que el gobierno establezca medidas de contención”, asegura Serrano.
El avispón asiático o “Vespa velutina” tiene la cabeza y el tórax más oscuros que la “Vespa crabro” o avispa habitual en Europa: es de color marrón tirando a negro frente al amarillo del insecto autóctono.
Además, sus patas son de color amarillo mientras que las de la avispa europea son marrones.
Apicultores, especialmente afectados
Un sector especialmente movilizado contra esta especie invasora es el de los apicultores por la amenaza que supone su presencia para sus colmenas.
Por ello desde sus asociaciones se promueve “la colocación de trampas y la retirada de nidos tanto por iniciativa del gobierno regional como de los ayuntamientos”, añade Serrano.
Con el fin de divulgar la amenaza que supone la presencia de esta especie invasora, ambas organizaciones ecologistas promueven charlas como la que el próximo sábado 18 de abril ofrecerán en el Fluviarium de la localidad cántabra de Liérganes.
El acto, que contará con la presencia del presidente de CODACC Carlos Valcuende, explicará cómo reconocer la especie y establecerá pautas para colaborar en la erradicación tanto de avispas como de sus posibles nidos.
La información va dirigida no sólo a la población urbana, sino también a senderistas, cazadores o ganaderos ya que estas personas pueden toparse con más facilidad con estos insectos dada su ubicación en entornos rurales. EFEverde