España debería “invertir 40.000 millones de euros en los próximos 10 años” para alcanzar los objetivos de eficiencia energética en edificios que marca la Unión Europea, ha asegurado el CEO de la entidad especializada en “activación de capital ecológico “Greenward Partners, Eduardo Brunet.
“La eficiencia energética es la mayor fuente de energía del planeta” pero está “oculta” porque “no se activa”, ha explicado Brunet durante la presentación de un informe con cinco medidas para financiar estas intervenciones sin desembolso para el propietario ni coste para las arcas públicas.
Reactivar el capital ecológico en edificios, regular las hipotecas verdes o implantar un sistema que cuantifique la eficiencia energética, son algunas de las medidas propuestas por esta empresa financiera española para acometer proyectos de ahorro energético en inmuebles.
Brunet ha recordado “la importancia de alcanzar este objetivo en una situación de emergencia climática”.
A pesar de que “la eficiencia energética está en el corazón del denominado Green New Deal“, este objetivo “permanece oculto en el parque edificado”, ya que “8 de cada 10 hogares en España son energéticamente ineficientes”.
Para que España alcance los objetivos de eficiencia energética en edificios marcados por la Unión Europea, “será necesario invertir 40.000 millones de euros en los próximos 10 años”, ha asegurado el CEO de esta entidad especializada en “activación de capital ecológico”.
El Préstamo para la Activación de Capital Ecológico (PACE), es un mecanismo que “permite que el capital de los inversores privados financie el 100 % del coste de las mejoras eficiencia energética, con un plazo de amortización de entre 20 y 25 años”.
Según este experto, “el repago de la financiación se canaliza a través de una contribución local no tributaria que gira el ayuntamiento competente”, y que “no supone un impuesto nuevo ni una subida de los existentes”, ha asegurado.
Concebido como una “alternativa para facilitar la financiación de la eficiencia energética” donde las entidades locales no apliquen el sistema PACE, Greenward propone “la regulación de las hipotecas verdes”, que se postulan “como garantía de repago de créditos destinados a la reducción del consumo energético en inmuebles”.
Una opción que “aún no se ha desarrollado reglamentariamente” es la de los Certificados de Ahorro Energético (CAE), un sistema de “medición del ahorro energético obtenido” tras acometer proyectos de eficiencia energética.
Brunet ha apuntado que este plan “permitiría emitir certificados transmisibles a las empresas obligadas a cumplir las cuotas de ahorro”, ha señalado.
Un “sistema de contratos de eficiencia energética medida” en el que las empresas energéticas facturen por los ahorros energéticos como un servicio de eficiencia, “permitiría medir el ahorro energético, diferenciando entre energía consumida y la energía ahorrada”.
Asímismo, para impulsar la eficiencia energética de los edificios, el consejero delegado de Greenward ha pedido una “reforma de la Ley de propiedad horizontal“, de modo que se incluyan en ella “el deber de conservación de los inmuebles y las obras necesarias” para alcanzar este objetivo.
“La buena noticia es que hay un enorme volumen de recursos financieros privados que demandan este tipo de proyectos de inversión”, ha señalado Brunet, para quien la adopción de estas medidas “permitirán conducir el flujo de estos fondos privados hacia la inversión en eficiencia energética”.
El informe ha sido presentado en vísperas del Día Internacional de la Eficiencia Energética -efeméride que se celebra cada 5 de marzo desde 1998-, con la finalidad de “reflexionar y crear conciencia de la importancia del uso racional de la energía”. EFE