EFEverde.- El polvo del desierto del Sahara fertiliza el mar con hierro soluble, según un estudio realizado por investigadores del Centro de Investigación Atmosférica de Izaña, la Universidad de La Laguna y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas.
El artículo ha sido publicado en la revista Atmospheric Environment y en él se recuerda que el norte de África es la mayor fuente de polvo desértico del planeta.
Cada año emite a la atmósfera entre 1 y 2 millones de toneladas de polvo en suspensión, el cual es de forma mayoritaria exportado hacia el Atlántico en la denominada capa de aire sahariano, que es una corriente de aire que transporta a las partículas de polvo desértico hasta el Caribe y las américas.
Los investigadores indican que con este estudio se muestra que una parte del hierro presente en el polvo del Sahara (principalmente ligado a las arcillas y óxidos de hierro) es soluble en agua de mar, y que, una vez depositado en el océano, está disponible como fertilizante del fitoplancton marino.
Partículas menores que una micra
El equipo de investigación encontró que la solubilidad del hierro es mayor en las partículas de polvo más pequeñas que una micra y que la solubilidad de estas partículas es mayor cuando están mezcladas con contaminantes ácidos, como el ácido sulfúrico y el sulfato amónico.
La solubilidad media del hierro total contenido en el polvo desértico es de un 0.7 por ciento, mientras que la del hierro contenido en las partículas de polvo menores que una micra es de un 6 por ciento en término medio, pudiendo aumentar hasta un 8 por ciento cuando el polvo está mezclado con sulfato amónico.
El origen de este contaminante que está mezclado con el polvo del Sahara se encuentra en las emisiones de la industria (refinerías, plantas de fabricación de fertilizantes y centrales térmicas) del norte de África y Europa y en las emisiones de los barcos que circulan por el Mediterráneo.
Importante para la biota marina y el clima
La fertilización del océano con hierro soluble juega un papel muy importante en la biota marina y en el clima, pues el hierro soluble influye en las tasas de crecimiento del fitoplancton y modula la capacidad de la biomasa marina para absorber dióxido de carbono en la atmósfera, explican los investigadores.
Este estudio se basa en muestras de polvo sahariano tomadas de manera directa en la capa de aire sahariano cuando esta pasa por el Observatorio de Izaña, en Tenerife.
Esta investigación forma parte del proyecto de investigación Aeroatlan (2015-66229), financiado por el Ministerio de Economía y Competitividad dentro del programa de proyectos de Excelencia. EFEverde