Efeverde.- El Ministerio de Asuntos Exteriores español ha confirmado a Efe la muerte de una joven española a causa del terremoto registrado ayer en Italia.
La mujer, según informaron ayer fuentes de la Cruz Roja italiana, falleció en la localidad de Illica, donde residía con su pareja, un joven italiano con el que se acabada de casar.
El consulado de España en Roma ha confirmado que Ana Huete, nacida en 1989 en Granada, es la única ciudadana española de cuyo fallecimiento en el terremoto en el centro de Italia se tiene noticia.
La familia de su pareja confirmó asimismo la identidad de la fallecida, a cuyos familiares directos se espera en el país.
Las fuentes italianas han explicado que sus autoridades todavía no han publicado una lista con los nombres de las personas fallecidas en el terremoto y que esa es la razón por la cual la joven no figura en una relación oficial.
Desde la madrugada del miércoles, cuando se produjo el terremoto de 6 grados en la escala de Richter y que ha causado 247 muertos, centenares de heridos y numerosos desaparecidos, la embajada y el consulado han estado en contacto con las autoridades italianas para conocer la situación de los españoles que podrían encontrarse en las localidades afectadas.
Exteriores hizo un llamamiento para que los ciudadanos españoles que pudieran estar en la zona devastada comuniquen su estado y un teléfono de contacto (+39 335 33 34 38) donde se atienden llamadas de emergencia.
La Cruz Roja italiana confirmó ayer la muerte de esta ciudadana española, entre los fallecidos en Illica, lo mismo que la periodista Sabrina Fantauzzi, que se encontraba en esa pequeña localidad en el momento del terremoto y que dijo que la chica estaba casada con un primo suyo.
En Illica, a unos 30 kilómetros de Amatrice, han fallecido, al menos, 120 personas y 368 han resultado heridos.
En el pueblo en plena zona montañosa, bomberos y miembros de Protección Civil continúan las labores de retirada de cascotes y búsqueda de víctimas y de posibles supervivientes.
Algunos de los damnificados han pasado la noche en un hostal, cuya propietaria se ofreció a alojarlos. Efeverde
