La recuperación del buitre negro, el cernícalo primilla, el aguilucho cenizo, el alimoche común, el milano real y el águila imperial, todas ellas aves amenazadas, es el objetivo del proyecto +GRAPEQ, que desarrolla desde hace un año la ONG GREFA.
El proyecto cuenta con el apoyo de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco) y se basa en la recuperación, la cría en cautividad, la reintroducción, el reforzamiento o en la vigilancia de nidos vía satélite de poblaciones de aves silvestres, según ha informado este lunes GREFA en una nota de prensa.
Especies Amenazadas
Las seis especies de aves objeto de este proyecto están catalogadas como amenazadas, bien a nivel estatal o a escala regional, como es el caso del cernícalo primilla en la Comunidad de Madrid.
Ernesto Álvarez, presidente de GREFA, ha hecho hincapié en la necesidad de “conservar nuestras rapaces y sus hábitats, ahora más necesario que nunca” debido a “su gran atractivo y por ser víctimas de muchas de las amenazas actuales a la fauna salvaje”.
El buitre negro y el cernícalo primilla son las rapaces de mayor y menor tamaño, respectivamente, incluidas en +GRAPEQ, cuyo lema es “Conservando poblaciones, del más grande al más pequeño”.
Respecto al buitre negro, el objetivo es contribuir a crear una gran población europea de esta especie, de la que GREFA ha liberado 15 ejemplares en dos zonas del norte de España donde se habían extinguido -la Sierra de la Demanda y Pirineos- y formar así 20 parejas reproductoras.
En cuanto al cernícalo primilla, la ONG ha construido gran cantidad de nidales en 20 años de trabajo que ha permitido criar cientos de parejas de esta especie.
Seguimiento GPS
Además, +GRAPEQ ha dotado de emisores GP a medio centenar de ejemplares de las seis especies beneficiadas por
el proyecto para su seguimiento científico, que han permitido detectar zonas donde sus amenazas son más intensas como sucede con el laguilucho cenizo en la comarca de La Sagra, entre Madrid y Toledo, o con el alimoche común en el noreste de Ourense.
El seguimiento con GPS también incluye al milano real y al águila imperial, dos especies catalogadas en España “en peligro de extinción”, al mismo nivel, por ejemplo, que el lince ibérico. EFEverde