EFEverde.- El último censo elaborado el pasado marzo para conocer la población reproductora de avutardas en Andalucía ha contabilizado un total de 470 ejemplares en nueve núcleos, lo que indica que la especie se mantiene estable respecto al 2014 (470 aves) y al 2015 (474) y aumenta un 3,1% respecto al 2003 (325).
Según ha informado la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio en un comunicado, de la población estimada, 130 ejemplares de avutarda son machos y 340 hembras, lo que significa que la proporción de sexos es propia de poblaciones estables.
No obstante, después del crecimiento registrado hasta el 2012 se ha producido en los último años una estabilización de la especie que aunque no alcanza la cifra de las 508 avutardas, considerada como el valor de referencia para confirmar que esta ave se encuentra en un estado favorable de conservación, sí está muy cerca (un 92%).
Respecto a los núcleos de población, el censo confirma que se está produciendo una concentración de la especie en dos grandes áreas, las Zonas de Especial Protección de las Aves (ZEPA) Campiñas de Sevilla y Alto Guadiato (Córdoba), que concentran dos tercios del total de ejemplares reproductores, además de volver a desaparecer de la campiña de Cádiz tras su presencia en el 2015.
Ampliamente extendida por buena parte de la Península Ibérica hasta mediados del siglo pasado, la avutarda -el ave de mayor peso de las que existen en nuestro país- ha venido sufriendo en las últimas décadas una pérdida de densidad poblacional y áreas de distribución a causa del abandono de las prácticas agrícolas tradicionales y del aumento de la mecanización del campo.
Con el fin de preservar la especie, la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio desarrolla un programa de conservación, que en estos últimos años se ha complementado con el proyecto Life Esteparia, el cual culminó en septiembre del 2014
La avutarda y otras aves en peligro de extinción
En la actualidad, Andalucía es la región con mayor número de especies esteparias de España con un total de 25 diferentes, de las cuales quince están amenazadas, entre ellas, la avutarda, catalogada en peligro de extinción, la alondra de dupont o ricotí y el aguilucho cenizo, vulnerables a la extinción.
Uno de los pilares en el programa de conservación de las aves esteparias es contar con el compromiso y apoyo de los agricultores, ganaderos y propietario de fincas para la mejora de estos espacios en general y de las condiciones de vida de estas aves en particular. EFEverde