Las precipitaciones torrenciales caídas en los últimos días en Japón han dejado al menos nueve fallecidos en Chiba (este de Tokio) y otras áreas del centro del país, zonas que aún se recuperaban de los estragos que dejó el fuerte tifón Hagibis hace dos semanas.
Las autoridades japonesas continúan este sábado con las operaciones de búsqueda y rescate en las prefecturas de Chiba y Fukushima, donde se han producido graves inundaciones y corrimientos de tierra a raíz de las intensas lluvias registradas durante la última semana.
En Chiba, 15 ríos resultaron desbordados e inundaron infraestructuras como carreteras, vías férreas y varios centenares de casas, lo que obligó a las autoridades a evacuar a unas 1.800 personas, según informó la cadena estatal NHK.
Las lluvias también provocaron la cancelación de centenares de vuelos este viernes en el aeropuerto internacional de Narita (Tokio), lo que unido a suspensión de conexiones ferroviarias y por autobús llevó a unas 3.000 personas a pasar la noche allí, según la agencia local Kyodo.
En algunas localidades de Chiba, la lluvia caída el viernes superó los 280 milímetros en un período de doce horas, más del máximo mensual medio en la zona, según datos de la Agencia Meteorológica nipona.
Hace dos semanas, uno de los tifones más poderosos de las últimas décadas en pasar por Japón dejó cerca de 80 fallecidos y severos daños materiales mayormente en zonas del oeste, el centro y el noreste del archipiélago japonés. EFE
