Pedalibre se refiere así a la carta que ha enviado recientemente la vicepresidenta cuarta del Gobierno a la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), en la que traslada propuestas para que los ayuntamientos de municipios de más de 5.000 habitantes potencien la bicicleta como alternativa de transporte limpio y sostenible en el contexto de desescalada de la crisis sanitaria por COVID-19.
Pedalibre coincide con Teresa Ribera en que la bicicleta es un medio de transporte “cero emisiones” que además resulta “sanitariamente seguro y eficaz” para reducir el riesgo de contagio frente al transporte público y el coche particular, especialmente para distancias de hasta 10 kilómetros, que constituyen la mayoría de los desplazamientos diarios en el país.
Carriles ciclistas provisionales
Aseguran que cada carril de coches que se sustituya por una vía ciclista provisional aumentaría cinco veces por hora su capacidad de desplazar pasajeros y reduciría además las emisiones por el menor tráfico de coches.
Pedalibre hace un llamamiento al Miteco para que desarrolle “un plan de urgencia con objetivos, medidas y financiación” que facilite el uso de la bicicleta en las ciudades en la desescalada del coronavirus.
“Sin un plan de urgencia con objetivos, medidas y financiación, la carta del Ministerio solo son buenas palabras, no una política de estado”, asegura la asociación y advierte al Miteco de que “sufrirá la multa europea” si no toma medidas, aprueba normas y financia acciones para que ciudades como Madrid reduzcan la contaminación.
Asimismo, la asociación denuncia las ayudas de 65 millones de euros aprobadas recientemente para la compra de coches eléctricos, de las que se beneficiarán unos 10.000 particulares, mientras recalcan que el Estado “no dedica recursos financieros al fomento de la bicicleta”, no colabora en la financiación de su compra o reparación, ni instala vías ciclistas provisionales. EFEverde