Al menos 75 personas murieron hoy, 14 siguen desaparecidas y más de 400 resultaron heridas de diversa consideración tras un terremoto de 6,6 grados registrado en la provincia noroccidental de Gansu, informó la agencia oficial Xinhua.
El seísmo se produjo a las 07.45 hora local (23.45 GMT del domingo) entre las comarcas de Minxian y Zhangxian, de la citada provincia, según el Centro de Control Sismológico de Gansu.
La mayoría de los municipios de la provincia se han visto afectados por el temblor y trece localidades aún siguen aisladas, por lo que no se descarta que el número de fallecidos pueda aumentar en las próximas horas, indicaron las autoridades locales.
El hipocentro del seísmo se localizó en la ciudad de Dingxi, a unos 170 kilómetros al este de la capital de la provincia, Lanzhou, y a 20 kilómetros de profundidad.
El temblor provocó el desplome de unas 1.200 viviendas y 21.000 más sufrieron daños, y en algunos de los pueblos cercanos al hipocentro, como Meichuan o Puma, hasta el 80 % de las casas se habrían derrumbado, según informó un oficial del departamento sismológico provincial a los medios locales.

Seis réplicas
La zona ha sufrido seis réplicas, la más severa de 5,6 grados de magnitud, que se produjo una hora y media más tarde del primer temblor, a las 9.12 hora local (01.12 GMT).
La Administración Sismológica de China ha puesto en marcha un plan de respuesta de emergencia y unos 2.000 soldados del Ejército de Liberación Popular, policías y más de 300 voluntarios de la provincia se han desplazado a la zona a la que también se han enviado 500 tiendas de campaña y 2.000 mantas para los afectados.
Además, el observatorio local de meteorología ha activado la alerta roja por las fuertes lluvias que se espera que caigan en la zona en los próximos días, lo que dificultará los trabajos de socorro.
Algunos de los servicios ferroviarios que comunican las provincias de Gansu y Shaanxi se han suspendido, mientras que algunas conexiones telefónicas no se pueden llevar a cabo debido a los cortes eléctricos que afectan a las comarcas cercanas al epicentro.
El oeste de China es una zona con frecuente actividad sísmica. En abril de 2010, un terremoto de 6,9 grados en la provincia occidental de Qinghai (meseta tibetana) causó la muerte de casi 2.700 personas. EFEverde
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