Madrid.- Los análisis oficiales sobre la calidad de las aguas de baño en la Unión Europea, tal y como se realizan actualmente, no recogen una "imagen real" del estado de las zonas de baño y ocio, según la Fundación Surfrider Europe, que pide aumentar los análisis que incluya los contaminantes químicos, los residuos o las aguas residuales.
La Fundación, que trabaja para proteger los océanos, las costas y a los usuarios haciendo un seguimiento de los residuos acuáticos, desarrollo costero, cambio climático, calidad del agua y salud de los usuarios de los océanos, asegura que el informe presentado este viernes por la Agencia Europea de Medio Ambiente sobre la calidad de las aguas de baño se basa sólo en el estudio de dos indicadores.
El informe incluye solo dos indicadores
Esos dos indicadores son el "escherichia coli" y el "enterococos intestinales", que están definidos en las disposiciones legales de la Directiva europea sobre la calidad de las aguas de baño (2006/7/CE) y son los que tienen un impacto más directo en la salud humana considerados hasta ahora por las autoridades europeas, según un comunicado de Surfrider Europe:
En opinión de la responsable de la Campaña de Calidad del Agua y Salud de Surfrider Foundation Europe, Lucille Labayle, recogida en la nota, "los análisis oficiales, tal y como se realizan actualmente, no ofrecen una imagen real del estado de las zonas de baño y ocio europeas".
Residuos, plásticos y químicos
Por un lado, la proliferación de algas y los residuos plásticos "sólo se incluyen en los perfiles de las playas o sólo se inspeccionan de forma visual".
Por otro lado, "la contaminación química no se tiene en cuenta en absoluto".
Y, además, el informe sólo menciona las muestras tomadas durante la temporada de verano, y únicamente en las zonas de baño identificadas como tales.
Según la Fundación Surfrider Europe, existen muchas actividades deportivas acuáticas y tienen lugar a lo largo de todo el año, a menudo en lugares distintos de las zonas de baño. "Estas personas también merecen estar informadas sobre la calidad del agua en sus lugares de trabajo", subrayan.
La Fundación recuerda que en 2021 presentó el Manifiesto Europeo por unas Aguas Saludables, en el que pide a la Unión Europea una revisión como una oportunidad para reconsiderar el control de la calidad de las aguas de baño sobre la base de 7 recomendaciones.
En concreto, la organización pide que se amplíen las zonas controladas, que se introduzca el control a lo largo del año y que se mejore la información al público.
Asimismo, pide que se añadan nuevos parámetros a vigilar, como los residuos, las floraciones de algas nocivas y tóxicas y los contaminantes químicos, elementos que aún no se incluyen en las consideraciones de la Directiva, aseguran.
Aguas residuales
Subrayan que como indica el informe publicado hoy por la Agencia Europea de Medio Ambiente, es importante destacar que esta revisión ocurre en el marco más amplio del Pacto Verde Europeo y del Plan de Acción Contaminación Cero, que aboga por un medio ambiente libre de sustancias tóxicas para los ciudadanos.
Y recuerda varias iniciativas para adaptar la legislación europea sobre el agua a las necesidades actuales, como la revisión de las listas de contaminantes químicos para las aguas superficiales y subterráneas y la Directiva sobre el tratamiento de las aguas residuales urbanas, sobre la que también se ha posicionado Surfrider Foundation Europe, aseguran. EFEverde
Sigue a EFEverde en Twitter
Debe estar conectado para enviar un comentario.