Madrid, 2 dic (EFE).- La organización ecologista Greenpeace ha cambiado las letras de ‘Madrid Green Capital’ de la Puerta de Alcalá por ‘Madrid Grey Capital’ para exigir al alcalde de la capital española, José Luis Martínez Almeida, “medidas reales” contra la crisis climática “y no campañas de lavado de imagen”.
En el día de la inauguración en Madrid de la Cumbre del Clima (COP25) de la ONU, Greenpeace dice en una nota de prensa que España “tiene ahora una gran oportunidad y responsabilidad para liderar la lucha contra el cambio climático”.
La organización ha llevado una acción reivindicativa cambiando la palabra “green” (verde) por “grey” (gris) en la frase ‘Madrid Green Capital’ que el Ayuntamiento ha instalado delante de la Puerta de Alcalá.
La Cumbre “debe ser el trampolín para el despegue definitivo de la ambición y de la acción climática“, dice Greenpeace en una nota en la que da cuenta de su protesta, destinada a denunciar que “no se están tomando las medidas necesarias para evitar que las temperaturas globales superen 1,5 ºC y evitar así los peores impactos del cambio climático”.
“Con campañas de greenwashing y palabras bonitas no vamos a arreglar la crisis climática a la que nos precipitamos con los compromisos actuales. Necesitamos acciones reales de la clase política en todos los niveles (municipal, autonómico y estatal) que pongan fin a los combustibles fósiles”, dice la responsable de la campaña de Cambio Climático de Greenpeace, Tatiana Nuño.
Según Greenpeace, la campaña “Madrid Green Capital” se apodera de un galardón (el de Capital Verde Europea) que la Comisión Europea otorga a las ciudades ejemplares en materia medioambiental.
La organización añade que el Gobierno local de Martínez-Almeida “ha atacado la sostenibilidad de la ciudad con medidas que incentivan el uso del automóvil o la suspensión de Madrid Central”, y agrega que Madrid acoge la Cumbre del clima “pero no por eso se transforma en una capital verde”.
Según la organización ecologista, “los líderes mundiales tienen la oportunidad de superar el creciente escepticismo mundial en torno a su capacidad para poner fin a la emergencia climática y de escuchar a las millones de personas que han salido a la calle para pedir medidas reales y urgentes para salvar el clima”.
Y añade que las “acciones reales” necesarias pasan por “mejorar urgentemente los objetivos de acción climática” y esbozar una hoja de ruta con planes “más ambiciosos” en 2020, asegurar que los costos de la transición energética no se trasladen a la población y que las comunidades vulnerables reciban apoyo para reaccionar ante los impactos climáticos.
También recomienda “evitar arruinar el Acuerdo de París con agujeros en el mercado de carbono” y “escuchar a la ciencia y a la gente, no a las poderosas industrias extractivas y a las causantes del cambio climático que bloquean el avance en la lucha climática”.
El alcalde Martínez-Almeida ha afirmado que la ciudad será “la capital del mundo” durante los días de la Cumbre, de la cual ha dicho que espera que sea “la culminación del Protocolo de Kioto y del Acuerdo de París” con la firma de un “Acuerdo de Madrid”. EFE
jnr
[divider]