La Asociación Mesa de la Ría ha presentado un escrito ante la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio en el que denuncian las fragilidad de las balsas de residuos de la mina de Riotinto (Huelva) y advierten del riesgo de que se produzca “una catástrofe mayor que la de Aznalcóllar”.
Ante esta realidad, según ha informado la asociación en un comunicado, se le solicita al departamento de María Jesús Serrano que “se proceda a la paralización cautelar del proceso de solicitud de la Autorización Ambiental Unificada para el proyecto presentado por Emed Tartessus para la reapertura de esta mina, como paso previo a la denegación de la solicitud y a su archivo.
La Mesa de la Ría ha recordado que desde que llegó a su conocimiento el proyecto de reapertura de la antigua explotación de la mina de Riotinto viene alarmando de los riesgos al ver “hasta donde puede llegar la Administración Autonómica para favorecer intereses privados especulativos, despreciando a la provincia de Huelva y a quienes en ella viven”.
Y es que, según han precisado, Emed no ha incorporado, como exige la legislación, en el expediente un estudio de posible rotura de las balsas de residuos mineros de las presas Aguzadera, Cobre y Gossan, donde pretende realizar depósitos que superen los 120 millones de metros cúbicos de lodos tóxicos.
Emed Tartessus pretende, “con el apoyo y la connivencia” de la Junta de Andalucía, dice la Mesa de la Ría, el recrecimiento del nivel de las balsas existentes para realizar los depósitos de residuos procedentes de la explotación minera.
Esto, en caso de rotura, “podría superar más de 10 veces el desastre de Aznalcóllar de 1998, con consecuencias catastróficas sobre la cuenca del Odiel, su entorno natural y sus habitantes, algo impensable en el marco de la Unión Europea”.
Y es que los daños afectarían a todas las poblaciones desde Minas de Riotinto hasta la desembocadura del Odiel en Gibraleón y Huelva capital, incluyendo los parajes protegidos de las Marismas del Odiel, que literalmente desaparecerían ante la ola de residuos tóxicos, han advertido. EFE