Greenpeace ha comenzado hoy una recogida de firmas para pedirles a las carteras de Sanidad y Medio Ambiente la prohibición del glifosato, un herbicida usado en la agricultura, silvicultura y jardinería.
En España se venden 125 productos con glifosato, clasificado como "probablemente cancerígeno" por la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (Organización Mundial de la Salud, OMS).
Glifosato
El glifosato es el principal componente del herbicida más vendido del mundo.
Greenpeace pone en marcha la recogida de firmas para que Sanidad y Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente defina "urgentemente" una hoja de ruta que vete este herbicida, empezando por los usos que suponen una mayor exposición pública, ya sea directamente o a través de los residuos en los alimentos.
El pasado 20 de marzo, la Agencia para la Investigación del Cáncer elevó el riesgo del glifosato y anunció que es "probablemente cancerígeno para los seres humanos".
Esta clasificación se basa en la "evidencia limitada" en seres humanos pero en una "fuerte evidencia" de que es cancerígeno para los animales.
Además, se sospecha que actúa como un disruptor endocrino y que es tóxico para la reproducción.
En España están autorizados 125 productos que contienen glifosato -diez de ellos autorizados hasta 2017, cuando la autorización en la UE termina a finales de 2015- y se usa ampliamente en la agricultura, silvicultura (cuidado de los bosques) y jardinería.
Por tanto, está presente en campos, parques y cunetas y también en el agua, el aire y los alimentos.
Según la organización ecologista, España debe aplicar el principio de precaución y suspender el glifosato, hasta que se complete su reevaluación en la Unión Europea.
Un reciente informe de Greenpeace sobre plaguicidas y salud muestra cómo los agricultores, sus familias y niños pequeños son los principales grupos de riesgo o los más vulnerables ante la exposición a los plaguicidas. EFE
