EFEverde.- La pardela desaparecerá de las islas del archipiélago de Baleares en seis décadas si persisten las capturas, casi siempre de forma accidental durante la pesca, ha alertado SEO/BirdLife.
“La supervivencia anual sigue siendo alarmantemente baja y todo apunta de nuevo hacia las capturas accidentales como su principal amenaza, lo que refuerza la necesidad de abordar este problema”, ha advertido Meritxell Genovart, investigadora del grupo de Ecología de Poblaciones del Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados, que ha colaborado en con SEO/BirdLife en un nuevo estudio sobre este ave.
Sobre la pardela balear
La pardela balear (Puffinus mauretanicus) es una especie de ave de la familia Procellariidae que cría únicamente en el archipiélago balear.
En general, los ejemplares adultos miden de 30 a 38 centímetros y pesan cerca de medio kilo. Tras criar en Baleares, se desplazan hacia en el Mediterráneo occidental y el Atlántico alrededor de la península Ibérica, e incluso alcanzan a las costas del Reino Unido, el sur de Escandinavia y el norte de África
Más de una década en declive
Un estudio demográfico realizado en 2004 sobre la pardela balear hizo saltar la alarma al comprobarse que su declive podría provocar la extinción de esta especie unas décadas.
“Poco más de diez años después, y pese a los avances sobre el papel, el pronóstico para la especie no ha mejorado”, ha apuntado la organización, que apoya su versión en nuevo estudio publicado en la revista “Journal of Applied Ecology”, que apunta como probable la extinción de esta ave en unos 60 años el caso de que no se adopten medidas para su conservación.
Nuevos datos
Este estudio del grupo de Ecología de Poblaciones del Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados para revisar el estado de conservación se la hecho empleando nuevas técnicas de modelización que permiten análisis más complejos inclusive la cuantificación de las causas de mortalidad.
Además de actualizar las estimaciones sobre la supervivencia y diagnósticos de conservación de la especie, en el nuevo estudio se han estimado nuevos parámetros demográficos, como el reclutamiento o la supervivencia juvenil.
También y por primera vez se ha cuantificado la mortalidad de este ave por artes de pesca mediante la recopilación de datos de recuperaciones de anillas, así como de datos de centros de recuperación de fauna silvestre.
“La información disponible es escasa, por lo que los resultados deben tomarse con cierta cautela y las administraciones deben hacer un mayor esfuerzo para recopilar datos”, apunta Genovart, autora principal del estudio.
Pep Arcos, responsable del programa marino de SEO/BirdLife, ha señalado que, “presumiblemente, y de acuerdo con la información acumulada a través de diversos trabajos en marcha, el problema afectaría a todo el ámbito de distribución de la especie, que incluye el Mediterráneo occidental y el área atlántica europea”.
Un avance en la investigación
La investigación publicada en 2004, que propició la revisión del Libro Rojo de las Aves de España, mostró un preocupante declive de la especie, que de seguir a aquel ritmo podría extinguirse en pocas décadas.
No obstante, aquel estudio no recogía las causas exactas, aunque apuntaba hacia que el mayor problema radicaba en una anormalmente baja tasa de supervivencia adulta y planteó como factor importante la mortalidad accidental en artes de pesca.
Tras la publicación de aquel estudio, y del Libro Rojo, BirdLife International catalogó a la pardela balear como “En Peligro Crítico” a nivel global, siguiendo las directrices de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
A partir de ahí, esta especie endémica en Baleares entró en las listas de varios acuerdos internacionales como el Convenio OSPAR, el Convenio de Barcelona y el Acuerdo para la Conservación de los Albatros y Petreles (ACAP).
Plan de recuperación
También se actualizó el plan de recuperación de la especie en Baleares (2004), fue elaborada una estrategia de conservación a nivel estatal (2005), y actualizado el plan de acción internacional (2011), ha explicado Bird Life.
Asimismo, todas las colonias de cría de la especie fueron incluidas en la Red Natura 2000, Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA) y las principales áreas para la pardela balear en el mar han sido, recientemente, designadas ZEPA marinas.