La actividad volcánica no es nueva en Islandia, un país con más de dos centenares de volcanes, de los cuales una treintena permanecen activos, pero desde hace unos días la amenaza ha aumentado en el suroeste de la isla, donde el pasado fin de semana llegó a generarse un “enjambre sísmico”: más de un millar de terremotos diarios. Aunque en las últimas horas el tamaño y la intensidad de estos movimientos de la tierra se han reducido ligeramente, la alerta sigue activa hasta el punto de que la ciudad de Grindavik fue evacuada este pasado martes. La probabilidad de una erupción sigue siendo elevada…
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(*) Pedro Pablo G. May es periodista y escritor. También dibuja: Mundomay es su universo gráfico, del cual forman parte las ecoviñetas de esta serie.
