La empresa Indra y la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) han desarrollado programas para el mejor control y coordinación de servicios en las "smart cities" (ciudades inteligentes), enmarcados en un proyecto europeo para la creación de hubs o laboratorios con la participación de cinco países.
La iniciativa pretendía "unir fuerzas" tanto de la parte de investigación como industrial para la creación de una serie de nodos o laboratorios ("hubs") para el desarrollo de la tecnología Smart Ciber Physical Systems Engineering (CPSE), han explicado los coordinadores por parte de Indra, José María Barriga, y de la UPM, Juan Garbajosa, en entrevista conjunta a EFE.
España y las "smart cities"
Los proyectos se enmarcan dentro del programa europeo de financiación de investigación e innovación Horizon 2020 y han tenido una duración de tres años desde 2015, según Barriga.
España participó en el proyecto junto a Francia, Alemania, Suecia y Reino Unido y cada país se centró en un área funcional diferente para el desarrollo de sistemas ciberfísicos como las ciudades inteligentes ("smart cities"), robótica, automoción, transporte marítimo, aeronáutica.
En España, "nos centramos en las smart cities", según Barriga, que ha añadido que para ello se utilizó la infraestructura de laboratorio del Campus sur de la UPM en donde Indra desplegó la tecnología.
La tecnología de Indra está basada en la plataforma Minsait IoT Sofía 2, que viene del proyecto Artemis 2 iniciado en 2008, según Barriga, y que "ha permitido la participación de pequeñas y medianas empresas (pymes), para el desarrollo de la tecnología de Indra en la cobertura a las smart cities".
Tres desarrollos
El resultado es el desarrollo de tres experimentos en el ámbito de las smart cities.
El primero es iWESLA, enfocado al consumo de agua con el objetivo de controlar el flujo en una instalación, que ha permitido medir anomalías, irregularidades, patrones de consumo, fugas, entre otros aspectos, según Barriga.
Este sistema se desplegó en un colegio y un centro deportivo de la localidad madrileña de Rivas Vaciamadrid y en el propio campus de la UPM, donde sigue instalado, ha aclarado Garbajosa, y ha señalado que el sistema ha permitido "fomentar un consumo responsable" y la detección de fugas a tiempo.
Para lograr la medición, la empresa A-Cing instaló caudalimetros y electroválvulas en las instalaciones capaces de medir el flujo.
Los datos se volcaban para ser analizados en la plataforma Sofía 2, para lo que se utilizó un desagregador desarrollado por la empresa Novelty.
Los primeros resultados demostraron un ahorro del consumo entre un 25 % y un 40 % "porque la monitorización hace que se tome conciencia del consumo", según Barriga, quien ha señalado que Indra está "añadiendo este sistema a las licitaciones públicas como una tecnología totalmente novedosa".
Gestión de servicios de forma integral
Smart Urbana es el segundo hub, con el que se experimenta la medición y monitorización de los servicios para gestionarlos de forma integral en las ciudades inteligentes de acuerdo al estándar de sostenibilidad basado en la ISO37120.
El ISO37120 recoge el Desarrollo sostenible de ciudades y los indicadores de servicios y calidad de vida y recoge áreas tan diversas como: economía, educación, medioambiente, finanzas, emergencias, gobierno, salud, seguridad, residuos, telecomunicaciones, planificación urbana, sanidad, agua.
El cuadro de mando de indicadores de la ciudad, el Smart Monitor, ha sido aportado por la Association for Sustainable Innovative Development in Economics (ASIDEES), que fue alimentado por diferentes sensores y dispositivos desplegados en la ciudad, información que "nutre a la plataforma Sofía 2, que conecta el mundo real con el teórico", según Barriga.
Una vez analizados los datos, "se puede controlar el estado de la ciudad", ha asegurado el experto de Indra, y ha añadido que, sin embargo, "el control de las variables depende de las autoridades políticas".
En este proyecto participaron cinco municipios como socios: Calviá (España), Volvi (Grecia), Faro (Portugal), Alba lulia (Rumanía) y Nasporeni (Moldavia).
"En España se está invirtiendo mucho y sacando muchas licitaciones para adaptar las smart cities", según Barriga, aunque cada municipio puede "centrarse" en los servicios y aspectos que necesite.
Barriga ha explicado que en Pontevedra y Toledo "hemos trabajado enfocados en turismo, en Barcelona en movilidad, mientras en A Coruña han sido pioneros en implantar un sistema para todos los servicios de la ciudad".
Además, Indra ha ganado recientemente una licitación para implantar en Las Palmas un proyecto de gestión integral de "smart cities" y otro en Cáceres centrado en patrimonio y turismo.
eCall para emergencias
Por último, el hub "Drones, ecall and Cyber Phisical Systems for Public Safety Answering Points 112" desarrollado para agilizar la respuesta de los servicios de emergencia.
A partir de abril de 2018, según normativa europea, es obligatorio que los coches vayan equipados de sistemas ecall o de la llamada también "caja negra", ha especificado el experto de Indra.
El ecall ha utilizado la tecnología Minsait Iot Sofía 2 para ensayar el uso en el nuevo sistema europeo de llamadas de emergencia que ha desarrollado Answare Tecnologies junto con el Centro Tecnológico de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones de la Región de Murcia (CENTRIC).
Este sistema permitirá la utilización de drones que se desplazarán hasta el lugar de un suceso, cuya información será analizada por Sofía 2 y permitirá adoptar las decisiones necesarias en caso de emergencia.
Este sistema estandarizará en España el uso de Public Safety Answering Points (PSAP 112).
Este proyecto ha sido seleccionado por la Comisión Europea como el mejor de los 23 financiados por su impacto en la sociedad. EFEverde
