El viento y las altas temperaturas complican la extinción del primer gran incendio forestal del año, declarado en el municipio castellonense de Villanueva de Viver, en el límite con Teruel, y que ha arrasado ya 3.000 hectáreas y obligado al desalojo de unas 1.750 personas.
Según las primeras hipótesis que barajan los técnicos, el fuego habría tenido su origen en una mala práctica durante una quema agrícola.
Aunque la evolución del fuego “no ha sido negativa esta noche”, la situación podría complicarse en las próximas horas por las elevadas temperaturas, que alcanzan ya los 20 grados, y el viento de poniente, “complejo y complicado” y con rachas que pueden alcanzar los 40 kilómetros/hora, ha advertido el secretario de Seguridad y Emergencias de la Generalitat Valenciana, José María Ángel.
Las previsiones meteorológicas para el día de hoy “no son aliadas” ni “esperanzadoras” y “dificultan mucho la extinción”, a lo que hay que sumar una orografía “muy complicada”, ya que se trata de una zona de barrancos y grandes desniveles, ha añadido.
La situación se complica también por la sequedad del terreno pues, en los últimos meses, en la zona ha llovido menos de la mitad de lo normal.
Según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), la temperatura para hoy en la zona afectada en la provincia de Castellón será de entre 20 y 25 grados, más altas en el fondo de los valles. La humedad se situará, además, por debajo del 30 %.
En cuanto al viento, irá girando a poniente y se mantendrá así toda la mañana. Las rachas registrarán velocidades de entre 30 y 40 kilómetros por hora, por lo que se darán unas condiciones que harán que las llamas se propaguen hacia el este.
Durante la jornada, en la zona castellonense los esfuerzos se centrarán en los municipios de Montán y Montanejos, que ya están desalojados, para evitar que las llamas lleguen a esa zona y se extiendan a la Sierra de Espadán.
En las labores de extinción, trabajan 18 medios aéreos y 400 personas sobre el terreno.
El fuego ha obligado a la evacuación de unas 1.500 personas de ocho municipios de Alto Mijares, 106 de ellas realojadas en los polideportivos de Segorbe y Onda, y el resto en casas de familiares o segundas residencias.
Entre los desalojados, figuran 73 personas de la residencia de personas mayores dependientes de Montán, que han sido trasladadas a la residencia pública de mayores de Burriana con un amplio dispositivo de ambulancias y vehículos adaptados.
Mejora la situación de Aragón
Según el Gobierno de Aragón, en la parte que afecta a la comunidad, el fuego evolucionó de manera favorable durante la noche y habría afectado en la zona a unas 800 hectáreas.
Mientras se da por asegurado el flanco izquierdo, prosiguen los trabajos para estabilizar la cabeza del fuego, en una zona más compleja por los accesos y la orografía.
En las labores de extinción trabajan tres cuadrillas helitransportadas, siete cuadrillas terrestres y seis autobombas y está previsto la incorporación, en el flanco aragonés, de tres brigadas del Ministerio.
En Aragón se mantiene activo el Nivel 1 del Plan Especial de Protección Civil de Emergencias por Indendios Forestales (PROCINFO) y, por el momento, continua el desalojo preventivo de la localidad de Olba y de varias masías y pequeños núcleos de San Agustín.
En total, ayer fueron evacuadas alrededor de 250 personas, que se realojaron en establecimientos hoteleros, principalmente en Venta del Aire y en domicilios particulares y que, según el jefe de servicio de Seguridad y Protección Civil, Miguel Ángel Clavero, todavía no pueden volver a sus casas.
También continúa cortada la carretera A-232, que da acceso a Olba, según la misma fuente. EFEVerde