Las organizaciones ecologistas Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace, SEO/BirdLife y WWF han remitido una carta al presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, en la que le reclaman apoyo urgente a la organización conservacionista Acción por el Mundo Salvaje (AMUS) para evitar su cierre.
En la misiva solicitan medidas que garanticen su futuro con condiciones de trabajo y de funcionamiento dignos y acordes "a la extraordinaria contribución que realizan".
Se suman así a la petición que también han formulado las organizaciones ecologistas con implantación en Extremadura, como ADENEX, ANSER, DEMA, Fundación Global Nature, Grus, la Sociedad Extremeña de Zoología, además de Ecologistas en Acción Extremadura y SEO/BirdLife Extremadura.
Desde hace 20 años
Estas organizaciones recuerdan que AMUS lleva más de 20 años trabajando para levantar lo que hoy es el segundo hospital de fauna salvaje de Extremadura y uno de los más importantes y punteros de España.
De hecho, señala que AMUS se ha convertido en una entidad de referencia internacional en su campo, recibiendo y tratando a más de 1.000 animales cada año, con cientos de voluntarios de toda Europa y decenas de profesionales que se han formado y en muchos casos, innovado en el complejo campo de la atención veterinaria de fauna salvaje.
Dado su importante papel en la conservación de la vida salvaje, lamentan la falta de apoyo institucional y la precariedad de los recursos, que no han impedido a AMUS realizar con éxito sus labores de conservación debido a la profesionalidad y abnegación de su equipo humano, pero que pone en riesgo su viabilidad a corto plazo.
Las ONG muestran su incomprensión ante la falta de apoyo para frenar el cierre de una asociación tan valiosa como AMUS y han pedido al presidente de la Junta que se comprometa y apoye con los medios adecuados su necesaria labor en defensa de la naturaleza.
Para ellos, su labor ejemplifica los esfuerzos de muchas iniciativas sin ánimo de lucro que han logrado dar a conocer y proteger el extraordinario patrimonio natural extremeño, una labor valorada y exportada fuera de España y que, sin embargo, a menudo ha pasado desapercibida para los sucesivos Ejecutivos autonómicos. EFEverde