El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ha desestimado los argumentos del Gobierno regional para reclamar que no se paralizara la caza del lobo, y ha recordado que este animal es una especie protegida, por tanto, no puede ser considerado su aprovechamiento cinegético.
La medida, que afecta a tres temporadas cinegéticas, entre 2016 y 2019, fue solicitada por la asociación conservacionista Ascel y estimada en su día por el TSJ, según ha informado hoy esa asociación en un comunicado.
De esta forma, el TSJ, que impone las costas del recurso a la Junta de Castilla y León, anula el plan de aprovechamientos del lobo en los territorios cinegéticos situados al norte de Duero, donde el lobo tiene un tratamiento distinto al del sur de ese río.
Ascel presentó hace un año un recurso judicial contencioso-administrativo contra el plan de aprovechamiento cinegético de la especie diseñado por el Gobierno regional y en base a ese recurso el tribunal acordó la medida cautelar de suspender la caza.
Frente a esa medida, la Junta de Castilla y León se mostró contraria pero el TSJ, en un auto emitido el pasado 6 de julio, ha desestimado los argumentos del Gobierno regional para reclamar que no se paralizara el aprovechamiento cinegético del lobo.
Ascel ha resultado que en el auto el TSJ ha advertido de que el lobo no puede ser considerado una especie cinegética y no puede ser objeto de caza.
Una especie protegida
También ha recordado que el lobo es una especie protegida por la normativa europea y nacional y, si bien es posible su gestión, ésta debe “garantizar la conservación de la especie”.
El Tribunal Superior de Justicia ha acordado la suspensión de la caza del lobo como medida cautelar porque si no se podrían ocasionar perjuicios de difícil reparación.
Ascel ha aprovechado la nueva resolución del TSJ, que viene a corroborar otra anterior emitida por ese tribunal el pasado mes de mayo, para pedir la dimisión del consejero de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, Juan Carlos Suárez Quiñones. EFEverde