Los hornos Pacific de Almadén

Publicado por: Redacción EFEverde 3 de mayo, 2017

La visita al interior de la mina del Parque Minero de Almadén es la parte más espectacular. Termina cuando el tren minero saca el grupo al exterior, y la intensa luz de la calle les ciega unos instantes. La primera vista que tienes es la instalación metalúrgica. Los hornos Pacific estuvieron en servicio casi 50 años.

La instalación metalúrgica de los hornos Pacific se empezó a montar en 1953 y entró en servicio al año siguiente, en 1954. Formó parte del plan quinquenal de inversiones de 1952 que se llevó a cabo en las minas como consecuencia de la importante obsolescencia de las instalaciones. En principio se montaron sólo dos hornos a los que se unieron otros dos unos años después. Estos hornos funcionaron año tras año hasta la parada que se produjo en los años 1991 y 1992. En 1993 y 1994 se reanudó la producción de mercurio con campañas de escasa producción. En los años 1995 y 1996 se realizan las que serían las últimas campañas de producción de mercurio con tres hornos.

La jornada de la planta metalúrgica variaba en función de los puestos. En el interior del edificio de hornos la jornada era de 8 jornales alternos mensuales de 6 horas cada uno (48 horas de trabajo efectivo al mes) de lunes a domingo. En el resto de los puestos era de 6 horas diarias, 6 días a la semana de lunes a domingo.

El 10 de octubre de 2002 comenzó la que fue la última campaña de producción de mercurio en Almadén tras la finalización del montaje de la nueva planta de desulfuración de gases. El horno utilizado fue de nuevo el nº 3, al que se le unió el nº 2 a partir del 12 de diciembre. Los problemas fueron continuos debido a la naturaleza del mineral, que producía gases con un contenido en azufre muy elevado. Esto hizo aumentar la corrosión de las condensaciones de acero inoxidable. La calidad del aire respirable en la instalación empeoró, y las mascarillas buco-nasales utilizadas se mostraron ineficaces frente a los gases generados por este mineral. En esta campaña se realizaron 37 cambios de puesto de trabajo de trabajadores para limitar la subida de sus niveles de mercurio en sangre y orina, y evitar así daños a su salud. La plantilla se incrementó hasta los 59 trabajadores. La situación llegó a su momento crítico con el grave accidente que se produjo el 12 de marzo de 2003. Un tramo de 16 m del colector de la chimenea de gases de 1,2 m de diámetro se desplomó por la acumulación de residuos y los frecuentes golpes de ariete que recibía por las numerosas paradas de la planta de desulfuración.

El 13 de mayo de 2003 se paró el horno nº 2 por incapacidad material de atenderlo con la plantilla disponible y el 23 de julio de 2003 se paró definitivamente el horno nº 3, y con ello se acabó para siempre la producción de mercurio en Almadén.

Redacción EFEverde

Un equipo de periodistas especializados en periodismo e información ambiental de la Agencia EFE.