Madrid, 17 ago (EFE).- Los Equipos de Investigación del SEPRONA han detenido este verano a nueve personas por provocar de manera intencionada o negligente once incendios que han afectado a las provincias de Lugo, Ávila, Gran Canaria, León, Castellón y Cáceres, ha informado este sábado la Guardia Civil.
Uno de los detenidos en Lugo es considerado “el autor intencionado de, al menos, seis incendios forestales en la ciudad”, ha señalado el cuerpo de seguridad del Estado en un comunicado, en el que destaca que “el factor humano está detrás de la mayoría de los incendios forestales que se producen en España”.
El incendio forestal más grave fue el provocado en la Isla de Gran Canaria, que afectó a alrededor de 1.500 hectáreas -230 pertenecientes a la Red Natura 2000-, y en el que tuvieron que ser evacuadas centenares de personas, detalla el comunicado.
Según la Guardia Civil, estos datos ponen de manifiesto “la importancia de la investigación policial integral” en la lucha contra este tipo de siniestros, así como la colaboración de los distintos actores implicados en las labores de investigación, para afrontar “un drama cuya transcedencia medioambiental y en la seguridad de las personas es enorme”.
La investigación llevada a cabo en León, entre Guardia Civil y Agentes Medioambientales de la Comunidad Autónoma, que permitió esclarecer el incendio ocurrido en la localidad de Paradilla de Gordón, con la detención de su autor, es uno de los casos que han destacado en la nota como ejemplo de la efectividad de la campaña de verano.
Atendiendo a los datos recogidos en los 15 últimos años, la mayoría de los incendios forestales se encuentran vinculados al factor humano, ya sea por obra de un incendiario o derivada de la negligencia en el uso del fuego, siendo muy pequeña o casi nula la incidencia de las causas naturales.
De los siniestros conocidos por Guardia Civil en los primeros seis meses de este año 2019, el factor humano estuvo detrás de más del 98 % del total de los siniestros.
La persona detenida en Lugo acusada de provocar seis incendios actuó “movido por razones laborales, concretamente por su deseo de que se mantuviese constituido en la zona un retén de extinción al que había pertenecido en campañas anteriores”, han destacado fuentes policiales.
Asimismo, el número de incendios forestales producidos por negligencias graves mientras se realizaban tareas en el campo, trabajos agrícolas, uso de maquinaria, “se ha incrementado de manera considerable”, han precisado.
La investigación policial y criminal de los incendios forestales se convierte así en “un instrumento fundamental para atajar el origen de esta problemática”, una de las estrategias “más eficaces para su prevención”, puesto que genera un efecto disuasorio en el incendiario y en la conducta negligente del resto de los ciudadanos, ha asegurado la Guardia Civil.
Estas operaciones se enmarcan dentro de las específicas para la reducción de delitos contra la fauna y destrucción de hábitat, así como para el esclarecimiento de su responsabilidad penal, previstas por el Proyecto LIFE de la Unión Europea “Guardianes de la Naturaleza contra el crimen ambiental”.
En este proyecto, coordinado por SEO Birdlife, el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil participa como socio beneficiario. EFE
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