Las altas temperaturas coincidiendo con el inicio de julio y las vacaciones han desinflado la participación del colectivo “Fridays For Future” (FFF) en su habitual concentración cada viernes, frente al Parlamento para protestar contra la crisis climática.
Frente al medio centenar de jóvenes que protesta cada viernes ante el Congreso de los Diputados, la participación se ha reducido en esta ocasión a apenas quince activistas medioambientales para reivindicar el derecho a disfrutar de un agua limpia libre de vertidos ilegales.
Pese a los 35 grados de temperatura en la calle, los participantes en la protesta gritaban con fuerza consignas al unísono como “queremos cambio, y no climático, porque el futuro no da igual”, y “me quedo sin lemas para tantos problemas”.
Además, los jóvenes han exhibido pancartas de cartón en las que se leía “si lo tiras al suelo, lo tiras al mar”, para concienciar del problema de los vertidos de las aguas residuales.
En verano la gente “huye de la ciudad” aunque la crisis climática persiste, ha explicado Alejandro Martínez de FFF para argumentar el motivo de la menor afluencia de manifestantes en esta ocasión y ha avanzado que este movimiento prepara ya “una huelga global” coincidiendo con la cumbre del clima de Naciones Unidas cuyas fechas variarán según el país, y en España será el 27 de septiembre. EFEverde