Cinco organizaciones ecologistas lamentan que el medio ambiente no se incluya en la recién constituida Comisión para la Reconstrucción Social y Económica por el Congreso de los Diputados, y consideran que la actual crisis de la COVID-19 es solo la punta del iceberg de una crisis mayor, la ambiental.
Exclusión del medio ambiente
Las organizaciones Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace, SEO/BirdLife y WWF señalan en un comunicado que la Comisión debería denominarse de Reconstrucción Social, Económica y Ambiental y que la salida de esta pandemia no solo debe “hipotecar” una rápida transición ecológica, sino permitir que sea “más rápida”.
[box type=”shadow” ]Los organizaciones reclaman una visión transversal del medio ambiente en la Comisión, para lo que reclaman las comparecencias de científicos, expertos en economía verde y organizaciones ecologistas, y miras a medio y largo plazo en las decisiones que se resuelva adoptar.[/box]
Igualmente, que la transversalidad se incluya en las cuatro temáticas que se tratarán en la Comisión para la Reconstrucción Social y Económica: el reforzamiento de la sanidad pública; la reactivación de la economía y la modernización del modelo productivo.
Asimismo, el fortalecimiento de los sistemas de protección social, de los ciudadanos y la mejora del sistema fiscal, y la posición de España anta la Unión Europea.
Las organizaciones llaman la atención para incidir en temas como “la economía verde, circular, neutra en carbono y que reduzca la utilización de recursos naturales” e instan a adoptar medidas económicas que permitan la creación de puestos de trabajo verdes como solución al “problema crónico del desempleo en España”.
Fiscalidad verde
Además, llaman a instaurar la “fiscalidad verde” que fomente las iniciativas empresariales y ciudadanas beneficiosas con el medio ambiente y “penalice las contrarias a la transición ecológica y la justicia social”.
Subrayan las organizaciones que el principio de “quien contamina paga” debe “dirigir la política fiscal del Estado”.
Señalan que deben eliminarse “todos los incentivos” contrarios a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y a la conservación de la biodiversidad.
“No es tolerable que se utilicen los impuestos de la ciudadanía para perjudicar su salud y afectar negativamente a su Patrimonio Natural o a su futuro”, aseguran.
España, según los ecologistas, debe “impulsar políticas basadas en una transición ecológica justa”, y abanderar el cambio para su promoción y liderazgo dentro de la Unión Europea.
La salud pública, señalan, pasa “necesariamente por garantizar y disfrutar de un medio ambiente saludable” que prevenga enfermedades, situación que derivará en la adopción de medidas tanto a nivel urbano como rural.
De las medidas que se adopten ahora no solo dependerá “la velocidad con la que se salga de la actual crisis económica provacada por la pandemia”, sino la “fortaleza y resiliencia que tendrá la economía española en los próximos años, la calidad ambiental, el bienestar de las personas y la proyección internacional”.
Condenan las medidas que han adoptado las comunidades autónomas de Andalucía o Murcia para reactivar la economía “a costa de desproteger el medio ambiente”, justo “el camino opuesto al que debe recorre España”. EFEverde